Lorenzo Franco: un artista plástico fuera de lo común
El tadeísta Lorenzo Franco es un artista plástico fuera de lo común, pues decidió, desde que estudiaba en la Universidad, alejarse del estereotipo del artista que explora el fondo de las cosas, para dedicarse a su principal pasión: comunicar ideas sencillas para entretener a partir de la animación.
En entrevista con El Espectador, el egresado habló sobre su formación académica en Utadeo y su importante participación internacional en producciones como “La Noria”, un proyecto de animación que ha recibido más de ochenta premios internacionales, y también de su experiencia en Wizart Animation en Moscú. Su mayor sueño, dice él, es trabajar en Pixar.
Lorenzo recientemente desarrolló una plataforma para enseñarle a las personas que no hablan inglés para que creen sus propios emprendimiento de animación. “La Universidad me ayudó a crecer en todos los terrenos. Creo que no fueron específicamente las clases, pero con los compañeros se crearon grupos interesantes de discusión”, agrega.
El tadeísta relata que su encuentro con la animación fue a los 13 años, época en la que su mamá le compró una mesa de dibujo: “Desde muy niño me gustaron los dibujos animados. Incluso hay una anécdota que cuenta mi hermano en la que él entra a mi cuarto y yo estoy viendo muñequitos y me dice: “Ya es hora de crecer”. Creo que la carrera me dio las bases claras para establecer para dónde quería ir, que era la animación”, evoca.