Finanzas locales están en cuidados intensivos
Durante esta pandemia, el Gobierno nacional, a través de su ministro de Hacienda, ha fortalecido las finanzas públicas centrales en detrimento de los departamentos y municipios. Así lo expresa el profesor emérito de Utadeo Salomón Kalmanovitz, en su más reciente columna de opinión en El Espectador. Por ejemplo, recuerda el experto, que el Gobierno decidió ayudar a las empresas privadas y no a los entes públicos territoriales.
“Los gobernadores y alcaldes tienen la delicada tarea de implementar las duras medidas que emanan del Gobierno central para que sean aceptadas por las poblaciones bajo su jurisdicción directa, a veces en medio de resistencia y desórdenes. Lo deben hacer por medio de presupuestos golpeados por la reducción de sus ingresos, a la vez que se ven obligados a gastos mayores derivados de la emergencia sanitaria”, plantea Kalmanovitz.
Así, indica el tadeísta, la reducción de algunos impuestos, entre ellos a los licores, el tabaco y los juegos, son, en parte, ingresos de los que dependen los departamentos. Algo similar ocurre con la reducción de los ingresos por cuenta del registro de vehículos y la sobretasa a la gasolina. Sumado a otros factores tributarios, precisa Kalmanovitz, los ingresos de los departamentos disminuyeron en un 45% frente al año anterior.
De este modo, las finanzas locales entraron en cuidados intensivos, en la medida que las regalias también se verán disminuidas en, por lo menos, un 40%, al tiempo que ven como decrecen las transferencias que la Nación les hace.
“Los departamentos, en particular, han suspendido todas sus inversiones, no tienen flujo de caja suficiente para pagar sus nóminas ni para pagar sus deudas, con lo cual se puede deteriorar su calificación crediticia”.