El dibujo en tres actos
El lanzamiento del libro Ver Amorosamente Pese a Todo se llevó a cabo el pasado 19 de abril, en el marco de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, en el Gran Salón Ecopetrol de Corferias. En esta ocasión, la conversación fue entre Francisco López, autor del libro, y Javier Gil, director de la Escuela de Artes de Utadeo.
Para Javier Gil, este libro es un homenaje a la niñez. A través de recuerdos de la infancia de Francisco, que detonan su imaginación en torno al quehacer del dibujo, el libro presenta cómo el dibujar y el crear son, esencialmente, un acto de amor.
El libro se divide en tres actos, como el dibujo. El primero es definir los límites del objeto, tomar del todo aquello que se va a dibujar y separarlo del resto. Para ello, y con una mirada pedagógica, López usa un cubo como unidad total, y como si de cavar se tratara, empieza a quitar lo que sobra, a darle forma al dibujo.
El segundo acto es el pliegue, el movimiento. Para describirlo, con el detonante de una mariposa que cruzó su habitación, “Pacho” introduce la acción en el dibujo. Describe la manera en que los trazos captan la forma en que un objeto se mueve.
Finalmente, el tercer acto es el recuerdo. Y este punto es trascendental para el libro pues invita a pensar con imágenes. Francisco recuerda su infancia, los cuadros de las baldosas del corredor y su cuarto, y a partir de ahí lleva su imaginación a volar, ve el pasado con los ojos del presente y construye una nueva realidad.