Luego de la visita del presidente de Colombia, Iván Duque, a la zona donde se adelantan los trabajos de construcción del Túnel de la Línea, el diario La República consultó a expertos acerca de las “promesas incumplidas” por las administraciones anteriores frente a este proyecto que, se estima, ya asciende a más de 3 billones de pesos en inversión y que ya lleva en ejecución más de diez años. El túnel busca conectar al centro del país con el Pacífico colombiano. Sobre ello, el medio de comunicación habló con el profesor de la Especialización en Gerencia del Transporte de Utadeo, Germán Prieto.
El experto señaló que, a diferencia de otros proyectos de infraestructura que sean construido en el país, el problema del Túnel de la Línea no ha sido de corrupción sino de dificultades de ingeniería y contractuales: “La ingeniería colombiana ha demostrado que tiene capacidades para resolver los problemas pero donde tenemos graves problemas es en los mecanismos de contratación y en los procesos de control. A veces, las firmas constructores tienen más abogados que ingenieros. Hay muchos problemas administrativos, de cierres financieros…el país está todavía en pañales en contratación por concesión de tal manera de que los contratos se desarrollen como se prevé, con los tiempos adecuados”, indicó el tadeísta.
Según lo reseña el medio, la obra está compuesta por 25 túneles, 31 puentes, 18 kilómetros de segunda calzada y tres intercambiadores viales. Desde las primeras décadas del siglo XX, este túnel ha sido el tema de discusión de 29 administraciones nacionales. Por su parte, el gobierno Duque se comprometió a terminar la obra en mayo de 2020, con una inversión cercana al medio billón de pesos.