La corporeidad es la integración permanente de múltiples factores que constituyen una única entidad. Factores psíquico, físico, espiritual, motriz, afectivo, social e intelectual constituyentes de la entidad original, única, sorprendente y exclusiva que es el ser humano, es decir soy yo y todo aquello en lo que me corporizo, todo lo que me identifica.
Es importante saber empezar por querernos a nosotros mismos e involucrar a las futuras generaciones con esos claros ejemplos de afecto que se pueden dar como ejemplo a quienes siguen nuestros paso, de ese modo partimos que podemos enseñar a tener amor por nosotros como personas, por nuestro cuerpo, por nuestro espíritu y por nuestro físico, y del mismo modo enseñar a los demás a hacer lo mismo con otras personas.
El caso de Andrea Torres Bermúdez de 24 años estudiante de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas donde estudia Pedagogía Infantil, su tesis es realizada en una propuesta sobre la sexualidad, para niños de 2 a 4 años donde plantea la importancia de tener confianza en si mismo y en los demás, algo que en la actualidad demuestra la manera en que un abrazo puede significar un abuso.
Los principios de casa demuestran que hay que desconfiar de todo el mundo, por el simple hecho que, la sociedad permite que las personas totalmente ajenas a nuestro mundo en el momento en que se quieren acercar a nosotros nos pueden hacer daño, ya sea físico o moralmente, es ahí donde empezamos a formar a las personas para saber diferenciar el mal del bien.
Afecto puede sonar o encaminar a la palabra amor, lo claro es que no sabemos quien se acerca con esa intención, es ahí donde la desconfianza entra, y donde el ser humano actúa para sacar su lado negativo y cerrar las puertas, es simple, hay que saber diferenciar los que creemos se acercan con malas intenciones y los que llegan y actúan de la mejor manera sin esperar que sea así.
La palabra corporeidad expresa una idea, un concepto múltiple, plural, complejo y diverso de una unidad. Uno que a su vez no tiene otro igual, individuo único e irrepetible, sujetos todos diferentes, personas que todavía estamos tratando de comprendernos, el amor a nosotros mismos es lo más importante y fundamental principio por el cual debemos empezar a crecer como personas para formarnos como grandes en la sociedad, si te quieres a si mismo quieres a los demás.
Así que las emociones, las acciones y los significados en la convivencia cotidiana son una enseñanza para el mañana que permite innovar, a partir de prácticas fructíferas, sustentadas en enfoques actualizados y en nuevos contenidos interdisciplinares que faciliten la experimentación, la resolución de problemas, y así, probar, investigar y aprender del conflicto y la diversidad que existe entre ese yo y los demás que viven el día a día la vida tal cual como usted lo hace.