La grasa pertenece al grupo de alimentos energéticos y la encontramos en alimentos de origen animal o vegetal; sus principales funciones son:
- Brindar energía y calor corporal; se utiliza como depósito y reserva
- Ayuda en el metabolismo, absorción y trasporte de las vitaminas liposolubles (A, D, E, K)
- Sustrato necesario en la producción de hormonas y enzimas
- Elemento estructural de las membranas
- Componente principal del cerebro
- Mantenimiento de una piel saludable
Por esto es importante incluirla en la alimentación diaria, convirtiéndola en un nutriente esencial e imprescindible para la vida. La cantidad y la calidad de la grasa consumida determina su efecto sobre la salud, “todo en la justa medida”. El exceso de este nutriente puede desencadenar sobrepeso y obesidad, el consumo alto de grasa saturada puede aumentar los niveles de colesterol en sangre, desarrollando aterosclerosis y aumento en el riesgo de enfermedad cardiovascular.
Alimentos fuentes de grasa saturada: Generalmente esta grasa es sólida a temperatura ambiente y se encuentra en cortes grasos de productos de origen animal (costilla de cerdo, tocino), lácteos enteros (mantequilla, quesos madurados, nata), productos de pastelería (panes hojaldrados, bizcochos).
Alimentos fuentes de grasa monoinsaturada: Aceite de oliva, aguacate, almendras, semillas.
Alimentos fuentes de grasa Poliinsaturada (omega3): Pescados azules (salmón, sardinas, atún), nueces.
Alimentos fuentes de grasa Poliinsaturada (Omega 6): Aceite de girasol, maíz, soja.
Lee siempre el etiquetado nutricional, así puedes elegir y escoger la opción de grasa más saludable. Recuerda que al variar alimentos incluyes otros nutrientes en el día a día: de vez en cuando unas sardinas o frutos secos; una buena opción es utilizar el aceite de olivas crudo en las ensaladas.
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Jacquelin Villalobos F.
Nutricionista Dietista
Bienestar-Deportes