Orgullo Tadeísta: María Andrea Prieto ganó la Beca Chevening 2019-2020
“Cuando uno hace las cosas de corazón y da lo mejor de uno, eso se retribuye”, dice, en medio de la emoción, María Andrea Prieto, egresada del programa de Diseño Industrial en 2012, quien hace parte del selecto grupo de 25 colombianos que el Gobierno del Reino Unido seleccionó para que desarrollen sus estudios de maestría en ese país el próximo año, como parte de la Beca Chevening. Actualmente, este programa recibe postulaciones para el corte 2020-2021, hasta el 5 de noviembre (Puedes conocer más información o postularte aquí).
Gracias a este estímulo, nuestra tadeísta estudiará la Maestría en Desarrollo Internacional en la Universidad de Manchester, puesto veintisiete a nivel mundial en el Ranking QS y considerada como una de las más importantes en Inglaterra: “Es una universidad a la que le importan mucho las personas, es muy humana”, destacó.
María Andrea Prieto
Las becas, que se ofertan en 144 países, buscan fortalecer el liderazgo de profesionales con una alta formación académica, con el ánimo de transformar las realidades de sus países. Se ofertan anualmente y tienen dos momentos de selección. El primero de ellos, a través de la escritura de un ensayo, y la segunda, a partir de una entrevista en la Embajada del Reino Unido en nuestro país. En el caso colombiano se postularon 1400 personas, de las cuales fueron preseleccionadas 90.
La beca incluye, entre otros, el costo de la matrícula, un estipendio mensual, los gastos de viaje desde y hacia el Reino Unido y los costos de la visa. Al finalizar la maestría, los beneficiarios deben volver al país, mínimo dos años, e implementar lo que aprendieron en su formación posgradual.
Graduación de María Andrea en el año 2012
Una apasionada por lo social
En el ADN de Prieto siempre ha estado esa pasión por lo social, misma que la llevó a estudiar en Utadeo. Allí las clases pero especialmente haber trabajado en el colectivo Creativamente en lo Social trazaron su camino, logrando un diálogo con el diseño como generador de soluciones para la transformación de las comunidades. Una de las experiencias que la marcó fue haber trabajado en el barrio Los Laches, en el centro de Bogotá.
“La Universidad lo que hizo en mí fue potenciar ese aspecto, pues me enseñaron a identificar necesidades, conocer lo que se necesita y trabajar de la mano con la comunidad. Aquí hay mucha diversidad y aprendí mucho de ella”, agregó.
Sin embargo, sabía que si las inequidades sociales presentes en este barrio eran grandes, en otras latitudes del país, especialmente en zonas afectadas por la violencia, se iban a hacer más evidentes, razón que la llevó a trabajar por dos años en Urabá, impartiendo la asignatura de inglés a niños de primaria. Allí el trabajo lúdico basado en el diseño de experiencias fue el derrotero para crear discursos que motivaran a los estudiantes hacia la excelencia académica.
Posteriormente, como parte de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), trabajó como consultora en el desarrollo de estrategias para víctimas del conflicto armado con algún tipo de discapacidad. La misión era entender y escuchar para luego proponer y transformar comunidades como las de Bojayá, Riosucio y Quibdó, en Chocó, a partir del empoderamiento de los líderes sociales, y así, romper los imaginarios y estigmas que se centraban en torno a esta población vulnerable.
María Andrea trabajó con la comunidad de Los Laches cuando hacía parta de Creativamente en lo Social
Es así como fruto de todo este trabajo nace en 2017, en asocio con algunos de sus colegas, la Fundación Salud a la Escuela, especialmente el programa Veo Luego Aprendo, del cual la tadeísta es su directora. Mediante esta iniciativa se brindaron talleres de educación y de salud a los niños de Chocó, a partir de cuatro brigadas, en las que los menores recibían una revisión de optometría, así como gafas, teniendo en cuenta que, según cálculos de la Organización Mundial de la Salud, del 20 al 30% de los niños en el aula necesitan de estos accesorios para poder desarrollar de forma adecuada sus actividades académicas.
“Crean en ustedes y en su potencial. Si tienen claridad sobre cuáles son sus metas en la vida, tienen la capacidad para postularse a este tipo de becas, pues contrario a lo que la gente piensa, no son inalcanzables. Si más líderes de nuestro país tienen este tipo de oportunidades, se pueden generar transformaciones reales”, es la invitación que brinda nuestra tadeísta a toda la comunidad universitaria para que hagan parte de la convocatoria.
Con los conocimientos adquiridos en el país europeo, Prieto espera continuar trabajando con comunidades afectadas por el conflicto armado, a partir de proyectos de desarrollo y de fortalecimiento del potencial de los liderazgos, pues como ella misma lo dice, llegar a tener este privilegio no solo ha sido trabajo de ella, sino el de muchas personas que le han enseñado en su camino por la vida, desde colegas, familiares, comunidades y profesores. Ahora su misión será “ver y aprender para cumplir los sueños de otros”.