Espacios y mobiliarios para la innovación pedagógica en Aula 360º
Hoy día las instituciones educativas hablan de innovación pedagógica, no solo a partir de las metodologías de enseñanza de los profesores, sino también desde la implementación de tecnologías de punta, el uso de espacios educadores y de mobiliarios que faciliten el aprendizaje. Sobre esta temática versó el Tercer Encuentro sobre Ambientes y Experiencias de Aprendizaje Aula 360º, organizado por Kassani, en asocio con Utadeo, el pasado 21 de abril en el Auditorio Fabio Lozano. Allí, educadores, diseñadores y arquitectos se dieron cita para conocer las últimas tendencias educativas en organización de espacios para las escuelas.
En primer lugar, Peter Brown en su conferencia “El diseño de las escuelas de adentro hacia fuera” recordó que hoy más que nunca los colegios buscan diseños sostenibles, en aspectos tales como la calidad del aire, las condiciones de luz, e incluso el uso del color en sus paredes, de tal forma que se estimulen los sentidos y se incentiven las preguntas y los descubrimientos por parte de los estudiantes.
Para el arquitecto estadounidense, es fundamental comprender cuáles son las necesidades del estudiante y del profesor, al tiempo que los primeros brindan ideas sobre la conformación de las aulas, las cuales imaginan como un lugar cómodo, para la investigación y con cárteles de colores: “Los niños son conscientes de su relación con el espacio en el aula, nosotros debemos diseñar estrategias que ayuden a esa relación”, destacó Brown.
La activación de corredores con el fin de generar espacios no solo para educar sino para emocionar, la recuperación de los espacios públicos alrededor de la escuela, así como pensar en una biblioteca donde sus actividades se combinen con la hora del almuerzo y multiaulas o espacios flexibles con mobiliarios modulares, son algunas de las propuestas que se han realizado en instituciones educativas de Chicago y Arkansas: “Desde el diseño podemos crear espacios que generen el aprendizaje. Pero también debe darse el aprendizaje constante por parte del profesor, generar nuevas dinámicas y conocimiento. Crear un espacio que no sea planeado es bueno para que los estudiantes puedan hacer algo con él”, finalizó el experto.
El mobiliario: un mediador en el proceso de aprendizaje
Posteriormente, la directora del programa de Diseño Industrial de Utadeo, Diana Castelblanco, participó en el conversatorio sobre mobiliario en la educación, junto con Humberto Muñoz, profesor de la Universidad Nacional, y Giovanni Ferroni, decano de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad Javeriana.
Para Castelblanco, hay unas emergencias en innovación pedagógica que generan la necesidad de cambiar el tipo de mediación educativa, en un mundo donde el aula compite con otras alternativas pedagógicas como las plataformas tecnológicas y la ciudad como espacio educador: “Los diseñadores tenemos la función de crear mobiliarios que sean narrativas”. De igual forma subrayó que el mobiliario debe desmitificar las relaciones de poder entre el profesor y el estudiante.
Por su parte, Muñoz sugiere que el mobiliario acompaña el rito social de la educación, y en ese sentido, es un agente mediador entre el actor social, el niño y el maestro. El docente advierte que es necesario romper lo acartonado de aprender: “Yo si creo que el diseño con sus propuestas puede contribuir a la motivación, a considerar a la escuela como un lugar donde aprender es delicioso”.
De igual forma, para Ferroni el mobiliario si debería ser una herramienta para la mejora de los procesos de aprendizaje: “Muchos crecimos en ambientes tradicionales, mobiliarios de madera, pocos flexibles y centrados en el maestro”, destacó el académico, quien además sugiere que debe pensarse en el ser humano y en los contextos educativos para luego pensar en los materiales del mobiliario: “Como diseñadores trabajemos de manera integral con otros actores como psicólogos y educadores. Es importante hablar con los niños, hacer un trabajo etnográfico”.
Los ambientes de aprendizaje del mañana
La segunda gran conferencia estuvo a cargo de Frank Locker, considerado uno de los mas importantes arquitectos de nuestro tiempo, gracias a sus aportes al diseño de espacios educativos y la calidad de aprendizaje: “El diseño del Siglo XXI está centrado en el estudiante. Estamos formando ciudadanos para la era electrónica. Pasamos a una etapa donde el profesor es el guía”.
Para Locker es clave que a través de los espacios se tejan relaciones interdisciplinarias, una enseñanza personalizada y diferenciada que emocione, divierta y motive al estudiante, a tal punto que este haga del aprendizaje el tema de conversación con sus padres. El expositor destacó que algunos estudios reflejan que el 60% de los trabajos que existirán dentro de diez años aún no han sido inventados , razón por la cual los espacios de aprendizaje deben sensibilizar al estudiante a experimentar en nuevos conocimientos, explotando las inteligencias múltiples de estos: “A partir del mobiliario se está invitando al estudiante a configurar su propio entorno”.
Finalmente, Locker habló acerca de la capacitación y concurso que se está realizando a los arquitectos en Bogotá, con el fin de crear colegios innovadores que respondan a los retos de este Siglo. Así pues, se han cambiado las estructuras tradicionales, así como el uso de los espacios que faciliten los movimientos por parte de los estudiantes.
Una mirada al estado actual de la educación en Colombia
Como parte del cierre del evento, la rectora de Utadeo y ex ministra de Educación Nacional, Cecilia María Vélez, sostuvo un diálogo con Rafael Orduz, gerente de la Fundación Compartir y experto en educación, en torno a la importancia de la evaluación tanto para estudiantes como para profesores, así como los programas de desarrollo educativo implementados por el Gobierno Nacional.
Vélez señaló que a través de la evaluación se envían mensajes que le sirven a las instituciones, los maestros y estudiantes para hacer planes de mejoramiento: “La calidad no la hace un maestro, la calidad la da la Institución, donde lo que vale es el trabajo en equipo y el liderazgo del rector”. Frente a las más recientes reclamaciones hechas por algunos gremios de educadores, la rectora recordó que dichas mediciones no son perfectas, razón por la cual es necesario que en cada proceso se realicen mejoras. De igual forma, instó a reconocer a la gente que está haciendo bien las cosas.
La rectora de Utadeo recordó además que es importante que la universidad se articule con el aparato productivo: “Si nosotros logramos una relación con la empresa, por un lado mejoramos la metodología y desarrollamos mejores competencias para los estudiantes. Pero para eso es necesario que las empresas entiendan que la universidad les puede aportar”.
Frente a las altas tasas de deserción estudiantil, Vélez destacó que en programas como ser Pilo Paga deben respetarse las diferencias como el motor para el desarrollo de las competencias. Sin embargo, también refleja el aspiracional del estudiante, donde se parte del imaginario que las universidades privadas son mejores, y en ese sentido, permea una lógica elitista.
Finalmente, la directiva destacó que el acceso democrático al bilingüismo es un camino largo, pero que aún así puede lograrse: “La calidad no es lo que el maestro enseña sino lo que el niño aprende. El sistema educativo ha mejorado, se ha dado cierta continuidad, pero es un proceso lento”. El uso de la tecnología en el aula para evitar las distracciones, sumado a las clases activas y la evaluación 360 para profesores son algunas de las claves que propuso Vélez para la mejora de la educación: “En una universidad centrada en el estudiante, la investigación debe servir para mejorar la docencia”.







