Las nuevas tecnologías día a día nos están invadiendo en la sociedad, donde se han convertido parte fundamental e importante para poder ¨vivir¨. La adicción a Telefonía móvil, videojuegos, ordenador, Internet, chats, etc...Conforman aparentemente el origen del problema.
Los celulares son el ejemplo más grande para explicar la dependencia de los usuarios de estos aparatos gracias a la interacción que representa tener acceso inmediato a mensajería, redes sociales, llamadas o aspectos aún más triviales como mirar la hora, algo que a diario se ve, es tan solo el simple hecho de querer tener el ultimo celular que salió al mercado por que las misma compañías hacen que quienes estén interesados vean el producto como el mejor, los usuarios de smartphones revisan en promedio 150 veces al día el aparato.
Es importante ver la oportunidad que representa para las empresas la distribución y presentación de datos en estos dispositivos, también es claro el efecto que tienen estos aparatos en las relaciones interpersonales, pues estudios complementarios aseguran que los usuarios de estas tecnologías no pueden estar sin el celular por más de seis minutos en el día. La internet invade a diario el mundo entero es el medio por el cual se está comunicado con cualquier rincón del planeta, y que hace fácil la búsqueda de lo que se quiere saber, de este mismo modo llegar a encontrar cosas que sin saber que existen la internet nos lo hace saber.
L. es una adolescente de 15 años que dedicaba un promedio de acceso a Internet de más de 8 horas diarias. La niña, en un proceso paulatino pero implacable, había terminado por negarse a seguir asistiendo a la escuela, e incluso renunciaba a salir con sus amigas. Cuando sus padres la trajeron a consulta su patrón horario había cambiado. L. dormía durante el día y la noche se la pasaba conectada a la red (chat). Lo más significativo: Su renuncia total a cualquier otro tipo de actividad.
El ejemplo de L. pone en evidencia que existen, medios como la Internet, u otros medios tecnológicos, que hacen un llamado a que en realidad es preocupante el uso excesivo que pueden hacer de ellos. Este tipo de conductas repetitivas tiene en común que resultan placenteras en la primera fase, pero después no pueden ser controladas por el sujeto. Al igual que ocurre con otras adicciones, la persona acabará efectuando dicha conducta ya no tanto por la búsqueda de gratificación, sino por reducir el nivel de ansiedad que les produce el hecho de no realizarla.
En definitiva, la adicción es la que nos impide desarrollar habilidades sociales en la vida real, a partir de aquí se desarrolla una tendencia al aislamiento, se rompen las relaciones sociales, se produce el fracaso escolar y aparece la agresividad en ocasiones dirigida contra los propios miembros de la familia, así que deje a un lado la tecnología e intente tener una vida real!