Información general de la asignatura
ARGUMENTACIÓN
- 009256
- 3
- ÁREA ACADÉMICA HUMANIDADES Y ESTUDIOS LITERARIOS
PRESENTACION
Justificación
Aunque creemos, por lo general, que nuestros argumentos son buenos y que efectivamente sirven para afirmarnos en nuestras creencias, para persuadir a otros y para mantener diálogos constructivos y edificantes con nuestros interlocutores, la realidad es que pocas veces es así. Nos enfrascamos en diálogos de sordos, nos limitamos a proferir opiniones sin considerar la audiencia, la ocasión o el modo, sin adoptar un método en la conversación, sin verificar la calidad de nuestro razonamiento.
Argumentar es una actividad natural, pero esto no quiere decir que argumentemos bien por naturaleza. Es preciso educarnos en argumentación, y esta educación, como toda educación humanística, no termina nunca. Este curso es el lugar propicio para que empecemos a mejorar nuestra capacidad argumentativa.
Discusiones como las de este trino y sus respuestas son absolutamente estériles, no nos llevan a ninguna parte, ni siquiera a entender la naturaleza del desacuerdo, son una muestra de los pésimos argumentos con los que todos los días se disputa el derecho y el poder, y con los que se decide el futuro de todos.
Producir argumentos constructivos en favor de cualquier posición, argumentos que sean persuasivos, lógicamente correctos y que permitan resolver o, al menos, desarrollar críticamente una diferencia de opinión con un interlocutor, este es el reto que los invito a asumir en esta clase. Y asumirlo es muy importante no sólo a nivel individual, sino también a nivel social. Necesitamos urgentemente elevar el nivel de nuestras discusiones.
Aunque creemos, por lo general, que nuestros argumentos son buenos y que efectivamente sirven para afirmarnos en nuestras creencias, para persuadir a otros y para mantener diálogos constructivos y edificantes con nuestros interlocutores, la realidad es que pocas veces es así. Nos enfrascamos en diálogos de sordos, nos limitamos a proferir opiniones sin considerar la audiencia, la ocasión o el modo, sin adoptar un método en la conversación, sin verificar la calidad de nuestro razonamiento.
Argumentar es una actividad natural, pero esto no quiere decir que argumentemos bien por naturaleza. Es preciso educarnos en argumentación, y esta educación, como toda educación humanística, no termina nunca. Este curso es el lugar propicio para que empecemos a mejorar nuestra capacidad argumentativa.
Discusiones como las de este trino y sus respuestas son absolutamente estériles, no nos llevan a ninguna parte, ni siquiera a entender la naturaleza del desacuerdo, son una muestra de los pésimos argumentos con los que todos los días se disputa el derecho y el poder, y con los que se decide el futuro de todos.
Producir argumentos constructivos en favor de cualquier posición, argumentos que sean persuasivos, lógicamente correctos y que permitan resolver o, al menos, desarrollar críticamente una diferencia de opinión con un interlocutor, este es el reto que los invito a asumir en esta clase. Y asumirlo es muy importante no sólo a nivel individual, sino también a nivel social. Necesitamos urgentemente elevar el nivel de nuestras discusiones.
OBJETIVO DE APRENDIZAJE
El objetivo general del curso es el siguiente:
Estar en capacidad de producir argumentos constructivos en favor de cualquier posición que sean (1) persuasivos para la audiencia en cuestión, que (2) permitan resolver o, al menos, desarrollar críticamente una diferencia de opinión y que (3) respondan a patrones de corrección lógica.
Para lograrlo necesitamos cumplir tres objetivos específicos:
1. Estar en capacidad de hacer intervenciones orales cuyos puntos sean razonables, bien estructurados y memorables, que fluya con naturalidad e incorpore pausas, ritmo y entonación.
2. Estar en capacidad de avanzar una posición en el contexto de un diálogo teniendo en cuenta las posiciones y compromisos del interlocutor.
3. Estar en capacidad de reconocer, evaluar y producir argumentos que correspondan a diferentes esquemas argumentativos.
Estar en capacidad de producir argumentos constructivos en favor de cualquier posición que sean (1) persuasivos para la audiencia en cuestión, que (2) permitan resolver o, al menos, desarrollar críticamente una diferencia de opinión y que (3) respondan a patrones de corrección lógica.
Para lograrlo necesitamos cumplir tres objetivos específicos:
1. Estar en capacidad de hacer intervenciones orales cuyos puntos sean razonables, bien estructurados y memorables, que fluya con naturalidad e incorpore pausas, ritmo y entonación.
2. Estar en capacidad de avanzar una posición en el contexto de un diálogo teniendo en cuenta las posiciones y compromisos del interlocutor.
3. Estar en capacidad de reconocer, evaluar y producir argumentos que correspondan a diferentes esquemas argumentativos.
FECHA DE ACTUALIZACION
2024-11-22