Por: Antonia Gómez Almarales
¿Vieron los Oscars? Los pobres tuvieron el peor rating en toda su historia. Yo los estaba viendo, y cuando llegaron a la categoría de mejor documental, me dio mucha risa escuchar al comentarista tan desconcertado por el ganador: My octopus teacher. Él decía que le parecía una película extraña, yo estaba comentando los premios con una amiga y ella me dijo que también le había escuchado a alguien decir que era un filme raro, entonces aprovechando que está en Netflix, me lo vi por pura y física curiosidad.
Craig Foster es el encargado de guiarnos a lo largo de la película, es un cineasta que desde hace algún tiempo perdió la inspiración y, en medio de su búsqueda por la misma, decide ir a bucear a un bosque de algas cercano a su casa, donde un día se encuentra con un pulpo hembra —que, según Google, se llama Rossetta, pero que yo no me confío de a mucho porque no tiene página en IMDb— y se pregunta qué pasaría si la visita todos los días, dando como resultado una amistad entre él y el molusco.
La fotografía de este largometraje es algo muy agradable a la vista. El ecosistema acuático es hermoso por naturaleza, pero eso no siempre basta para que se vea como tal; es la forma cómo Craig encuadra la cámara la que hace que el lugar se vea mágico y surrealista. Él compone (ubica los elementos dentro del plano) de una forma muy bella, sacándole el máximo provecho a la flora del lugar, consiguiendo así planos con fondos espectaculares, casi siempre buscando la repetición o un patrón en el lugar; también nos trae planos que sería interesante entrar a discutir sobre si son o no contemplativos —yo no los sentí de esa forma—, pero que son hipnóticos, siento que podría quedarme viendo cómo las algas bailan con el movimiento del agua sin perder el interés durante algún tiempo. Sin lugar a duda, mi aspecto favorito es el contraste de color, es que, si no fuera un documental, yo estaría escribiendo sobre lo bien elegidos que están los colores, sobre cómo mantienen una armonía todo el tiempo entre los personajes (los peces) y su entorno, y cómo incluso los colores cambian cuando se acerca el peligro o cuando hay tristeza, pero aquí el crédito se lo lleva en su totalidad la Pacha Mama. Creo que de ahora en adelante buscaré paletas de color en la naturaleza.
Cuentan con una inmensa cantidad de material grabado, lo cual le juega mucho a favor. Casi que pueden darse el lujo de hablar de cualquier experiencia y tener las imágenes de ese preciso momento, imágenes que incluyen planos generales donde vemos la totalidad de lo que está pasando, planos contra planos (es decir, pueden tener un plano de Rossetta concentrada viendo algo y luego el contra plano de lo que está viendo: un cangrejo), planos detalle (un plano cerrado de la acción como tal, como una ventosa levantando algo) e incluso algunos hechos con un dron que nos muestra la vastedad del océano.
Hace mucho no veía un documental de este estilo, es muy parecido a los que hace National Geographic sobre la vida de un animal, realmente te enganchas con la vida de Rossetta y quieres saber si escapa o no de los tiburones. Creo que viene a ser como un ‘reality show’ del mundo animal.
No me pareció una película rara como me habían prometido, pero sí veo por dónde va la controversia. Al final Craig dice en voz alta que se enamoró de Rossetta, pero yo esto lo veo más como un problema del lenguaje (en este caso el inglés) y que a lo mejor le quedan cortas las palabras para expresar el vínculo que formó a lo largo de ese año. No creo que Craig se haya enamorado de una forma romántica, sino que siente amor (he is in-love, está en-amor) y yo la verdad veo su relación con ella muy similar a la que tenemos con nuestras mascotas —ya si estaba obsesionado o no, pues lo sabrá él—. Rescato el hecho de que Craig intentara no interferir demasiado con el curso natural de las cosas, o sea, su sola presencia interfiere, pero trata de no pasarse de la raya. Es una película sobre la relación de estos dos y cómo, conocer a Rossetta, llevó a Craig a ser mejor (en sus propias palabras), cómo lo llevó a aprender una cantidad de información sobre pulpos que probablemente no hubiera buscado en otro contexto. A mí me pareció muy entretenida, si la ven díganme si ustedes la encuentran rara. Verla me recordó lo increíble que es la naturaleza y, en general, el mundo exterior.
#SOSCineColombiano