Para muchos, los insectos suelen ser indeseables. Sin embargo, ellos están presentes en los diferentes escenarios de nuestra vida, ya sea a través de las plagas que echan a perder los cultivos y transmiten enfermedades, o bien, siendo bioindicadores de la calidad del ambiente en el que vivimos, y siendo benéficos, ofreciendo productos como la miel, en el caso de las abejas, o como enemigos naturales de las plagas.
Precisamente, la profesora Luz Stella Fuentes, directora del Centro de Biosistemas, y un grupo de estudiantes del “Semillero de Investigación en BioSistemas”, entre ellos estudiantes de la Maestría en Ciencias Ambientales de Utadeo, interesados en investigar en Entomología (estudio de los insectos), durante varios años han indagado acerca de la función de estos artrópodos como controladores biológicos.
Fruto de estas pesquisas, en el marco del 44 Congreso de la Sociedad Colombiana de Entomología (Socolen), que se llevará a cabo del 5 al 7 de julio en la Universidad del Bosque, se presentarán tres ponencias y dos pósteres de los estudiantes. Así mismo, la profesora Fuentes participará como conferencista en el simposio “Avances e integración del control biológico en la agricultura”, con su ponencia sobre “Interacciones biológicas entre enemigos naturales y otras alternativas de manejo”.
Luz Stella Fuentes, directora del Centro de Biosistemas de Utadeo
Los insectos: una solución amigable para el control de plagas
Para mitigar el impacto de las plagas en los cultivos, los agricultores han optado por alternativas químicas, que en la mayoría de casos generan impactos adversos para el ecosistema y el ser humano. La Entomología se ha convertido en protagonista para el agro, debido a que hoy día se evalúan otras estrategias de manejo, entre ellos los insectos benéficos, como los depredadores, que se alimentan de artrópodos plaga; hongos, bacterias o virus que le causan un daño o enfermedad a los insectos; parasitoides o larvas de insectos que se alimentan y desarrollan en las plagas, y nematodos o gusanos lisos, cilíndricos, delgados y diminutos que ingresan a los insectos para detener su desarrollo.
Sin embargo, como lo expresa Fuentes, para lograr una mayor efectividad en los controles biológicos, es necesario generar estrategias que involucren diferentes soluciones, ya sean químicas o biológicas. En muchos casos, las interacciones entre estos controladores es complementaria, pero en otras no es positiva, sino que al contrario compiten por su “presa”.
Alejandra Garzón, estudiante investigadora de la Maestría en Ciencias Ambientales de Utadeo
Dichas interacciones serán presentadas por la profesora Luz Stella Fuentes en su ponencia, cuya investigación se centra en establecer interacciones positivas en el control de plagas, al tiempo que se determinan controladores que no son compatibles entre sí, permitiéndole al agricultor contar con herramientas para tomar decisiones sobre qué combinaciones de controladores debe utilizar. El estudio se efectuó principalmente en cultivos de tomate, buscando controles efectivos a la plaga de la mosca blanca. También se han realizado análisis en cultivos de rosas.
Como parte de esta misma línea, los estudiantes y profesores del Distrito Claudia Bibiana Barragán y Miguel Herrera exploraron la interacción entre controladores biológicos y extractos vegetales para el manejo ecológico de la mosca blanca (Trialeurodes vaporariorum), plaga que afecta principalmente los cultivos de frutas, hortalizas y flores en el país. Allí, se evaluaron en laboratorio las sinergias o competencias entre enemigos naturales de la mosca y el control bioquímico (extractos vegetales), cuyos resultados pueden ser implementados por los agricultores en sistemas de producción sostenible. Los investigadores 0, quienes a su vez aprendieron sobre el control biológico de plagas.
Luis Alejandro Arias, director de los programas de Ciencias Marinas y Ambientales de Utadeo.
Por su parte, para los agricultores que emplean químicos, la estudiante Alejandra Garzón, con el apoyo de los profesores Luz Stella Fuentes y Luis Alejandro Arias, director de los programas de Ciencias Marinas y Ambientales de Utadeo, realizaron un análisis de la compatibilidad de plaguicidas químicos con los parasitoides Encarsia formosa y Amitus fuscipennis, dos especies de avispas que combaten a la mosca blanca en cultivos de tomate. Dichos hallazgos permitirán a los productores agrícolas saber qué tipo de plaguicida pueden usar y en qué cantidad pueden aplicarlo para no disminuir la efectividad de las avispas.
Claudia Bibiana Barragán, docente del distrito, estudiante e investigadora de la Maestría en Ciencias Ambientales de Utadeo.
Como parte de esta investigación, Fuentes, Arias y Garzón también presentarán un póster acerca de la compatibilidad de los plaguicidas sobre los parasitoides anteriormente mencionados. En el laboratorio se determinó la compatibilidad de 36 plaguicidas, así como la tasa de mortalidad que ejercen 15 fungicidas y 15 insecticidas utilizados en cultivos de tomate sobre las pupas y adultos de ambas especies de avispas.
En tercer lugar, Claudia Barragán y Miguel Herrera, propusieron la compatibilidad entre extractos vegetales, especialmente hongos, y una especie de chinche (Orius insidiosus), como controladores de la plaga Frankliniella occidentalis, un trips que afecta cultivos de tomate y rosas entre otros. En este caso, el insecto depredador succiona a su presa, mientras que el hongo la infecta hasta producir su muerte.
Ahora bien, ¿sabía usted que algunas plantas aromáticas expelen un volátil o aroma especial cuando se sienten amenazadas por una plaga? Esta es una estrategia planteada por Rosa Pachón, Liud Rodríguez, Luz Stella Fuentes y Alejandra Garzón, quienes han analizado la potencialidad de plantas como tomillo, ruda y orégano para atraer al acaro depredador Balaustium leanderi hacia algunas plagas de los cultivos de tomate, evaluaciones que han sido realizadas mediante un olfatómetro. Estos resultados permitirán ubicar estas plantas entre los cultivos para generar una atracción o refugio de enemigos naturales en pro de una regulación de plagas
Finalmente, la pedagogía y la ciencia se unen para enseñar a los más pequeños acerca del ciclo de vida de la mariposa búho (Caligo telamonius), haciendo uso de un mariposario, el cual se instaló en el Centro de BioSistemas y en el Colegio José Antonio Galán I.E.D., donde los profesores Oscar Reinel Alfonso y Diana Carolina Piracón imparten sus clases de Biología. El modelo permitió conocer acerca de las condiciones de temperatura, humedad relativa y la tasa de consumo de hojas de esta especie dentro de un ambiente semicontrolado, al tiempo que los estudiantes del colegio aprendieron acerca de la metamorfosis.
Miguel Herrera, docente del distrito, estudiante e investigador de la Maestría en Ciencias Ambientales de Utadeo.
18 años estudiando los insectos
Desde el año 1999, Fuentes es miembro de Socolen. Para ese entonces realizaba su tesis de pregrado. Posteriormente, presentó sus resultados de investigación en el mismo encuentro donde ahora participarán sus estudiantes. Luego, en este mismo espacio tuvo la posibilidad de presentar su trabajo de grado de maestría: “el congreso se centra este año en la investigación con aplicación a la vida cotidiana, entre ellos los agricultores. Se busca trascender más allá de los resultados de un artículo o una tesis, para llegar a su implementación en los sectores productivos. Es por ello, que en esta ocasión se tienen en cuenta investigaciones que ya han sido probadas en campo”, sostiene la investigadora acerca del congreso, que para esta ocasión tiene como lema “Entomología de impacto: solución a los problemas integrando disciplinas”.
Desde hace seis años, Utadeo abrió el espacio a la Entomología como electiva en los programas de pregrado en Biología Ambiental y de maestría en Ciencias Ambientales, conformando así semilleros de investigación y proyectos asociados al tema del manejo de plagas con énfasis en control biológico y manejo de habitát, lo cual ha significado una serie de trabajos de grado bajo esta línea.