La exposición de final de semestre del Taller vertical en fibras naturales y producción local de la escuela de diseño de producto de Utadeo, trabajó durante este semestre en el desarrollo de productos que sacaran provecho de la fibra y el jugo del fique, pensando en las comunidades de Chachagui, Guaitarilla y Tambo en Nariño; todo enmarcado en su compromiso de acción e investigación con las comunidades rurales.

El equipo fue apoyado por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, la Gobernación de Nariño, la Cadena Nacional del Fique, CORPOICA, y comunidades campesinas y artesanales de los municipios nariñenses. Se presentaron productos para empaques de supermercados en fibras Naturales, de aseo con los jugos de fique y sistemas, de mejoramiento tecnológico para la producción de dichos productos; todas las iniciativas de producto pensadas para que puedan ser implementadas por pequeños productores de las regiones rurales visitadas.

La exitosa presentación se realizó en el centro de arte y cultura con la presencia de representantes del gremio fiquero, del Ministerio de Agricultura, Corpoica, la SAC, entre otras instituciones. Esta presentación se le llevará a las directivas de la Corporación de investigación Agropecuaria de Colombia y a las comunidades en Nariño. Los profesores que lideran el taller son Juan Manuel España y Diego Granados.

Este año 2016 el enfoque fue el Departamento de Nariño, se descubrió que al momento de extraer la fibra de fique, se pueden rescatar diferentes elementos, como es el Jugo de Fique y el bagazo, de hecho tan solo el 4% de la planta es Fibra, el 51% es jugo y el otro 45% es bagazo.

El jugo tiene diferentes propiedades como ser un detergente natural además de ser pesticida, entre otras, los habitantes locales lo han tenido en cuenta para realizar jabones, con ayuda del SENA quien les proporcionó la oportunidad de realizar los procesos productivos para generar ingresos a los productores de Fique, ya que en esta Región se ha deteriorado la producción y extracción de la fibra porque ha sido reemplazado por los plásticos.

A partir de lo anterior, se basaron en los usos locales para generar más oportunidades y expandir a nuevos segmentos de mercado, cada grupo de trabajo con un mercado diferente, para Mascotas, Institucionales(Hoteles), Ecotiendas, para uso cosmético, locales, entre otros.

Se trabajó pensando en el usuario y en la producción que podría tener cada elemento en el lugar (Chachagui, Guaitarilla o El Tambo).

Proyectos

1. Una mezcla de resina con fibra para tener una "cascara" dura que pueda facilitar el lavado de los platos en la cocina, además se realiza una esponja de fique y láminas de jabón de se remueven cada vez que se necesiten.

2. CANIWOOF que mezcla todos los elementos del fique, el jugo (Jabones y shampoo), la fibra  (guante) y resina mezclada con fibra para realizar cepillos para tu mascota.

3. Muestra de elementos sostenibles que se pueden realizar con la fibra, elementos que llamen la atención.

4. Jabones con el precio más bajo, además de tener una peculiar forma pensada en la Ergonomía de las personas.

5. Jabones que representan la cultura e historia del departamento, como sus mitos y leyendas y el tradicional carnaval de Blancos y negros.

6. Jabones pensados en la belleza de la mujer con elementos añadidos para el cuidado de la piel.

7. Empaques sostenibles realizados con la fibra y almidón de Yuca que son otra opción para mantener los alimentos perecederos.

8. Jabones con diferentes olores que llevaran al usuario a una experiencia diferente.

MI EXPERIENCIA EN NARIÑO: Sara Rocha

“Solamente preservando nuestras energías autóctonas y nuestra capacidad creadora, es como podremos contribuir a la civilización universal incorporando a ella nuestras creaciones inéditas”- Castelao

Es con esta frase que comienzo el escrito, ya que mi modo de pensamiento, que es similar a este, sigue intacto o quizá se ha regenerado para reflexionar un poco sobre nuestro país y las sociedades que lo conforman, pero de alguna u otra manera, no hacen parte de este, mi viaje a Nariño fue una experiencia única en la que tuve la oportunidad de visitar diferentes municipios que en realidad nunca se me hubiera cruzado por la mente conocerlos, Chachagui, Guaitarilla y El Tambo, cada uno con historias, estilos de vida y mentalidades diferentes, es por eso que a través de este breve escrito intentaré hablar un poco sobre mi experiencia en cada uno de estos y realizaré una reflexión que va más allá del desarrollo objetual de nuestros proyectos.

Mi semana comenzó en Chachagui, conociendo los espectaculares paisajes que me ofrecía Nariño, puedo decir que son los mejores paisajes que he visto, allí comencé a pensar y especular todo lo que podría pasar, y en realidad hice muchos imaginarios que no tenían nada que ver con la realidad, Chachagui me recibió con algunas charlas informativas sobre el municipio y además tuvimos la oportunidad de hablar con las personas directamente relacionadas con nuestro proyecto.

Muchos de los artesanos me sorprendieron con sus conocimientos pero la mayoría son personas humildes que sus únicos conocimientos son la producción de fique y los cultivos, fue interesante presentar los proyectos, ya que, a pesar de que se trataba de algo académico, debíamos utilizar un lenguaje muy sencillo y expresarnos de una manera simple, lo cual pienso que los hacia sentir más cómodos. Chachagui, en comparación con lo otros municipios, estaba bien posicionado en términos de escuelas, biblioteca, apoyo por parte de alguna entidad, lo que es muy importante porque se puede llevar a cabo una constante comunicación, además de saber que siempre estará avanzando, es decir hay esperanza de prosperidad.

Luego continuamos el viaje hacia los siguientes municipios, nos detuvimos en la finca de un productor de Fique, quien nos mostro, con un rostro muy expresivo y al mismo tiempo con orgullo, su extenso cultivo y fue muy amable de explicarnos como se realizaba el proceso de extracción y crecimiento de la planta, yo no dejaba de asombrarme cada vez que nos adentrábamos mas a sus terrenos, y lo maravilloso que podría llegar a ser algo tan simple, fue en este momento en el que me detuve a pensar, que habían problemas reales que enfrentaban, toda su vida giraba entorno a esto, algo tan sencillo que podemos comprar en cualquier tienda, y algunos quizá lo menosprecian ya que en sus pensamientos el artesano no realiza cosas de calidad.

Esta primera visita fue la introducción antes de llegar al municipio de Guaitarilla, en donde, puedo decir que mis compañeros y yo nos topamos con la realidad que estas personas estaban viviendo, y en realidad nos dimos cuenta, cuanto apoyo necesitan para si quiera transportar sus productos a las afueras del pueblo, estas son las personas a las que la globalización a atacado directa y crudamente, ya que gracias a las fibras artificiales, les han quitado el trabajo, su mayor ingreso, y aunque sigan produciendo y vendiendo fique, no es suficiente ya que no tienen apoyo de ninguna entidad del gobierno, es como si no existieran en Colombia, y me causa mucha tristeza porque opino que la sociedad, y las nuevas generaciones podrían aprender un poco de sus estilos de vida y de los esfuerzos que realizan diariamente para sobrevivir. Al final de la visita sentí, gratitud y satisfacción de haber conocido este pequeño pueblo lleno de historias enseñanzas.

Se aproximaba el fin de nuestro viaje e íbamos camino a El Tambo, que es el lugar en el que originalmente íbamos a estar toda la semana, éste nos genero muchos conocimientos, puedo decir que la mayoría de ideas que hemos avanzado es gracias a la retroalimentación de los artesanos, productores y vendedores y también al uso de sus técnicas que generan ideas novedosas y atractivas. El Tambo fue importante para mi, porque muchos de los artesanos/productores fueron con sus hijos, ya sea porque ellos les ayudaban a escribir algunas notas o solo porque los iban a acompañar pero pienso que ellos también juegan un rol importante en toda esta experiencia, ya que, es gracias a las nuevas generaciones que el conocimiento y las técnicas sobreviven, además de portar con orgullo sus raíces y nuevas ideas del mundo.

El Diseño Industrial juega un papel muy importante en todo esto, ya que no es solo llevar a cabo la elaboración de proyectos que se vendan, sino que es también el conocer la comunidad, trabajar de lado de estas personas que más lo necesitan, no es solo generar necesidades nuevas, es trabajar con los que tienen más necesidad para que ellos puedan llegar a un desarrollo de productos autóctonos Colombianos, y así como esa pequeña ayuda podamos ayudar al desarrollo de un solo país.